El jueves estuvo en la Joy Eslava de Madrid con la gira de su álbum
‘Mentiras sinceras’, aunque tiene claro que este tipo de mentiras no
existe. El artista retoma una gira en solitario, con muchas ganas tras
tres años de silencio en nuestro país, que le llevará por toda la
geografía. También estará en América haciendo lo que más le gusta,
disfrutar del público en sus conciertos.
La gira te ha llevado a Madrid esta semana, imagino que había ganas.
Muchas ganas, la verdad. Hace como dos años y medio que no toco en
Madrid y por eso tenía muchas ganas de presentar el nuevo disco, de
reencontrarme con mis seguidores y de retomar mi carrera como solista
con este proyecto.
¿Es más difícil la capital, da más miedo?
La capital siempre es una cosa especial, uno siempre quiere dar lo
mejor. Miedo a estas alturas, no, pero respeto, siempre, y, sobre todo,
muchas ganas de disfrutar. La Sala Joy Eslava es una sala muy buena para
tocar, tiene una acústica que se disfruta. Intento dar lo mejor y
disfrutar del concierto para que la gente lo disfrute, se lo pase bien,
cante y se emocione.
¿Cómo te planteas la gira?
Hemos hecho ya varias fechas. El viernes 24 vamos a Burgos y en junio
hay algunas fechas también. A partir de julio me voy a América para
empezar la gira allí. Tengo muchas ganas de tocar, que es lo que más me
gusta.
Han pasado tres años desde el último disco, ¿por qué has dejado pasar tanto tiempo?
Yo no tengo la sensación de haber parado aunque es verdad que han pasado
tres años desde mi último disco en solitario pero no de mi último disco
porque hice un proyecto que se llamó Alex, Jorge y Lena, una
colaboración que grabé en Estados Unidos. Fue un proyecto enfocado para
el público americano que grabé con dos amigos. Eran 14 canciones nuevas
cantadas entre los tres, tuvo poca repercusión en España pero en América
nos tuvo bastante entretenidos entre promoción y conciertos durante dos
años. Tuve la sensación de aparcar mi carrera como solista pero cuando
acabé esta gira me puse con este nuevo disco. Ha habido una desconexión
en realidad de dos años con España, pero ahora retomo el contacto con
este disco y con esta gira.
Con ‘Mentiras sinceras’, el nuevo disco, te has volcado. Lo
has grabado con uno de los mejores productores, el italiano Mario
Guidetti, ¿cómo fue la experiencia?
Ha sido una pasada. Yo tenía muchas ganas de grabar en Italia porque su
música siempre ha sido para mí una influencia y, por otro lado, tenía
muchas ganas de trabajar con Claudio, que es un productor mítico que ha
trabajado con grandes figuras. Es un disco con mucho sabor italiano,
todos los músicos que han participado son de allí. Lo grabamos en Milán,
en el estudio de Claudio, y fue una gozada trabajar con él. Tiene una
visión muy amplia de la música, mucha experiencia. Es un gran músico, un
gran compositor. Superó mis expectativas, fue una experiencia
buenísima.
¿Hay mentiras sinceras?
No existen, es un imposible. Es un título un poco extraño que viene
vinculado a una de las canciones del álbum, que tiene una letra bastante
particular. Esconde una metáfora detrás que es algo así como que en
esta vida no siempre todo es lo que parece. En la vida, pienso, a veces
los seres humanos encontramos el camino que queremos seguir. No sé si
esta canción representa el disco porque es muy romántico, pero desde que
escribí esa canción me pareció un título original, sugerente.
¿Hay un Alex diferente en este disco?
Sí, creo que sí. Quizá no de una manera meditada pero este disco tiene
un aire diferente en parte por los ritmos, es bastante variado. Hay una
parte que te recuerda a lo anterior y otra que rompe con esos sonidos.
Es un disco menos corta venas, como digo yo en plan broma. Gira más en
torno al amor, al lado bueno del amor. Es más sonriente, más luminoso.
Después de 12 años, ¿qué ves cuando miras atrás?, ¿qué queda del artista de ‘Qué pides tú’?
Por un lado, queda mucho y, por otro, uno va evolucionando. Siento,
cuando echo la vista atrás, que el tiempo pasa muy rápido y me parece
mentira que hayan pasado 12 años. Pero queda toda la ilusión y las ganas
de hacer música que es lo que más me gusta. También veo los vídeos de
los primeros discos y me parece que no soy yo. Inevitablemente vamos
creciendo pero siento que en este tiempo he tenido la suerte de vivir
experiencias que ni en mis mejores sueños me hubiera imaginado. Ahora me
siento más seguro encima de un escenario, tengo más claro lo que quiero
transmitir. He tenido la suerte de aprender muchas cosas.
¿Cómo te sientes más cómodo: cantando o componiendo?
No entiendo una faceta sin la otra pero si tuviera que elegir me
quedaría con componer. Si el día de mañana no pudiera seguir cantando y
grabando discos, me encantaría seguir funcionando como compositor. Este
trabajo tiene una cosa muy bonita, que tiene tres fases: la composición o
el parto, la grabación en el estudio y el llevar todo eso al escenario
con los conciertos en directo, que es lo que más disfruto porque es el
momento en el que conecto con el público, pero si tuviera que elegir,
sin duda, escribir.
El primer single fue ‘Ella vive en mí’, ¿cuántas mujeres viven en ti?
Esta canción está dedicada a una mujer, que es la mía, pero también
podría ir dedicada a mi madre, a una buena amiga, a mi tía Manuela, que
falleció por desgracia hace años. Todos tenemos una mujer que vive en
nosotros aunque ya no esté. Tiene un sentido muy amplio, cada uno lo
puede interpretar a su manera, que es lo bonito de la música.
¿Cuándo uno está enamorado se siente el dueño de este mundo
como dice el single que suena ahora y que cantas con Susana de Efecto
Mariposa?
Creo que sí. Desde luego cuando uno está enamorado se ve la vida de otro
color. Todos estamos de acuerdo en ello. Cuando estás enamorado, hasta
el día más lluvioso es bonito.
¿Por dónde pasa el futuro?
Mi idea es hacer un disco en directo. Ahora voy a seguir promocionando
este disco por España primero y luego por América. Espero no tardar
tanto en sacar un disco en solitario.